Santander, 31 de julio de 2019-. El arquitecto, dibujante y escritor José María Pérez, más conocido como Peridis, ha afirmado hoy que, en estos momentos, no está claro si el turismo es “la solución” a la cuestión de la conservación y promoción del patrimonio cultural, o si “es un problema mayor que sobreviene”.
Peridis dirige el encuentro El Patrimonio Cultural: problemas, soluciones, expectativas, que se ha inaugurado este miércoles y que se celebrará hasta el viernes, 2 de agosto, en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
“El turismo, que se presenta muchas veces como la panacea para sacar rendimiento a la cultura, al patrimonio o al paisaje, a mí me recuerda al Lazarillo de Tormes, cuando Lázaro se pone debajo del cuenco donde estaba el vino, y el ciego le sacude, le rompe la cara y le cura con el vino. Lo que te mató, te cura. Y lo que te cura, te mata”, ha explicado.
El dibujante, que en 2018 recibió el Premio Nacional de Restauración y Conservación de Bienes Culturales del Ministerio de Cultura y Deporte, ha calificado el seminario El Patrimonio Cultural: problemas, soluciones, expectativas como “interesantísimo”, gracias a su programa, “muy rico y muy complejo”, y a la “variedad” de disciplinas dominadas por los ponentes, lo que, a su juicio, permitirá a todos los asistentes mirar los asuntos tratados “desde muchos puntos de vista”.
El historiador y director del Centro de Estudios del Románico de la Fundación Santa María la Real, Jaime Nuño González, ha impartido la primera conferencia de este curso, en la que ha asegurado que “el patrimonio, la historia y el arte” únicamente “tienen interés en cuanto son susceptibles de explotarse” económicamente.
Ha lamentado, además, que se limite la investigación de bienes culturales por el coste que implica y por la dificultad o imposibilidad de “trasladar a la realidad económica” de manera “inmediata” los resultados que se obtengan. “Se escava poquísimo”, ha señalado Nuño, quien ha puesto como ejemplo de esta problemática el Castro de Santa Tecla, el castro galaico “más visitado” y sobre el que no existe un proyecto de estudio desde 1988.
Ha opinado también que, ya que “la historia la hacen las personas”, es “imposible” que ésta sea objetiva. “Reconocer el pasado del colectivo al que pertenecemos, con sus aciertos y con sus desaciertos, es sensato”, ha señalado, para después matizar que tratar de “identificarlo” con el presente o de aplicarle los valores éticos actuales es “insensato e, incluso, una aberración”.
“La tentación de traer el pasado al presente es verdaderamente demasiado grande”, ha añadido Nuño, quien también ha afeado los estereotipos ligados al patrimonio, ya que, a su juicio, constituyen “una simplificación de la historia”. En ese sentido, ha mencionado los molinos de Castilla-La Mancha o las mujeres tapadas de Vejer de la Frontera, edificaciones o costumbres que se daban en más lugares de España, aunque ahora se liguen a territorios concretos.
Asimismo, ha comentado el efecto que tiene la popularización de determinados destinos turísticos para sus habitantes, citando Venecia o el ‘Mont Saint Michel’. “A veces los lugares se acaban convirtiendo en parques temáticos, con una población que termina siendo casi residual, como figurantes”, ha apuntado.
“La esperanza está en que hay interés por la historia, hay interés por el patrimonio, quizá lo que no sabemos es canalizarlo de una forma adecuada”, ha concluido Nuño.
En la inauguración del encuentro El Patrimonio Cultural: problemas, soluciones, expectativas han participado el vicepresidente de Cantabria y consejero de Universidades, Igualdad, Cultura y Deporte, Pablo Zuloaga; la presidenta de la Asociación Plaza Porticada, Elena García Botín; y la vicerrectora de Difusión e Intercambio Científico, María del Mar García Hernández.
Foto: Esteban Cobo (UIMP)