Santander.–Durante un encuentro con los medios de comunicación, el profesor e investigador de la Universidad de Alicante Francisco Martínez Mojica, referente científico mundial por el hallazgo del sistema CRISPR y postulado para el Premio Nobel por diversos grupos de investigación, ha explicado que se trata de una herramienta molecular utilizada para "editar" y "corregir" el genoma de cualquier célula. Eso incluye las células humanas, aunque hasta el momento solo se haya ensayado en ratones. Para entender el funcionamiento del hallazgo, podrían imaginarse unas tijeras moleculares capaces de cortar el ADN de manera precisa y controlada, lo que permite modificar su secuencia: "lo editas, y gracias a la capacidad de la célula, eliminas o insertas nuevo ADN y lo reparas", ha explicado Martínez Mojica. Ahí reside el éxito de la investigación, ya que "cualquier enfermedad debida a un defecto genético, como una mutación, se puede llegar a modificar con este sistema".
Además, otro de los grandes beneficios del hallazgo consiste en la posibilidad de programar bacterias para generar antimicrobianos específicos que maten exclusivamente a patógenos, ya que los antibióticos actuales matan los patógenos y matan las bacterias buenas.
En el mismo encuentro con los medios han participado Margarita Salas, profesora Ad Honorem del CSIC en el Centro de Biología Molecular "Severo Ochoa" (CSIC-UAM) y doctora Honoris Causa por la UIMP, y Jesús Ávila, profesor de Investigación del CSIC en el Centro de Biología Molecular "Severo Ochoa" (CSIC-UAM), que dirigen esta semana la XVII Escuela de Biología "Eladio Viñuela" La superación de la crisis a través de la cienciaen la UIMP.
El investigador Jesús Ávila ha recordado que "estos sistemas surgen de la curiosidad científica en momentos complicados, para resolver problemas básicos". De esta manera se han descubierto "herramientas derivadas para curar enfermedades genéticas hasta ahora intratables, conocerlas y tratarlas con terapias". Según Ávila, se debería ver la ciencia "no como gasto, sino como inversión: la investigación es fundamental para el desarrollo económico, y además se puede conseguir rentabilidad y retorno con el uso de patentes". Un ejemplo claro es la tecnología CRISPER.
Ávila, aunque no culpa a nadie, lamenta que "no se cuida la ciencia ni a los investigadores como se debería", y expresa lo que define como "reflexión patriota", con la conclusión de que "a pesar de tener entre las manos un gran hallazgo científico, al final el desarrollo y los méritos se los llevan otros, es decir, los que invierten en ciencia como hace China actualmente".
En este sentido, el investigador ha recordado que "estamos exportando doctores de nuestros laboratorios a los de Oxford y Cambridge, y supone un derroche después de haberlos formado".
Por último, la investigadora Margarita Salas, recientemente nombrada miembro de Consejo Rector de la Agencia Estatal de Investigación, ha explicado, en referencia a este organismo, que es importante "el hecho de poder influir positivamente en el desarrollo de la ciencia del país, contar con dinero y nombrar al comité científico". Con este órgano, encargado de aprobar la planificación de la Agencia y los procedimientos, criterios e indicadores para el cumplimiento de sus fines, se dota al sistema español de ciencia, tecnología e innovación de una gestión más flexible, ágil y autónoma. Salas reconoce que "haría falta triplicar el presupuesto actual en investigación científica", y recuerda que el mayor problema reside en la falta de personal y de talento joven. A este respecto, la investigadora considera que "en España formamos muy bien a la gente, pero después de sus tesis lo único que les queda es la salida al extranjero". Y aunque reconoce que ese intercambio "es bueno", lo ideal sería "poder volver" y, por supuesto, "hacer un pacto de estado por la ciencia que no dependa de las legislaturas".
Fotografía: UIMP 2016 | Esteban Cobo