Santander, 3 de septiembre de 2019.- El periodista y novelista Manuel Jabois ha intervenido este lunes en el ciclo de conferencias En Contexto, organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), cita en la que ha reflexionado sobre la situación del periodismo en la actualidad. En concreto, ha puesto el foco en la relación entre los profesionales de la información y la audiencia: “Lo que nunca va a sobrar en una crónica, en un buen reportaje o en una buena noticia es el pacto entre el lector y el periodista”.
Jabois ha valorado como “uno de los retos más bonitos” relacionarse a diario con el público, aunque ha afirmado que “también puede llegar a condicionar” las noticias o la forma en la se escriben las opiniones. Por eso, bajo su punto de vista, “lo realmente peligroso es el aplauso, el elogio” ya que se empieza a ser “rehén” de las opiniones de la audiencia.
“Muchas veces a la gente le interesa algo que periodísticamente no es importante”, ha subrayado, aconsejando que, aunque sea “difícil”, hay que “abstraerse de ese tipo de audiencia”. Según el periodista, “no puedes rendirte a lo que la gente le interese”.
En este sentido, ha criticado que, a veces, en los medios de comunicación se dé “más importancia” al entretenimiento que a la información. Como ha relatado Jabois, “ahora más allá de que las noticias se entiendan, funcionan o no y, sino funcionan, se descartan”.
A la hora de publicar noticias, el ponente ha hecho hincapié en “el impacto que pueda tener una noticia en el desarrollo de la vida de la sociedad”. Además, ha considerado que España “no para” informativamente: “Levantas una piedra y te encuentras un reportaje. Siempre hay de lo que escribir”.
Durante su intervención también ha explicado que “normalmente cuando peor van las cosas, mejor le va al periodismo. Los mejores reportajes son sobre la Tercera Guerra Mundial…”. “No hace falta una guerra mundial, pero podemos contar mejor la situación que nos rodea”, ha matizado. A pesar de la “delicada” situación del periodismo, Jabois ha admitido que “el hecho de tener un cierto descrédito, ayuda a la gente leal al periodismo a levantarse en armas”.
Foto: Esteban Cobo (UIMP)