Santander.- El científico titular del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Julio Pérez, el vicepresidente del Foro Español de Pacientes, Santiago Alfonso Zamora, el catedrático de Geriatría de la Universidad Complutense de Madrid, José Manuel Ribera, la tesorera de la Conferencia Española de Alzheimer (CEAFA), Rosa Brescané, y el presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), Luis Cayo, han participado en una mesa redonda bajo el título Atención domiciliaria, calidad de vida y humanización de la atención, moderada por la directora del Instituto de Formación de Cofares, Asunción Redín, con motivo del encuentro Atención domiciliaria: continuidad asistencial que se celebra en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
Pérez ha centrado su intervención en “disipar” las alarmas que, en ocasiones, surgen en torno a la evolución demográfica, en concreto respecto a la esperanza de vida. “Hay demasiado agorero en términos demográficos”, ha subrayado. Y es que en relación a las proyecciones de población, el investigador ha considerado que “probablemente nos quedemos cortos”.
Tal y como ha explicado, el habitual término “esperanza de vida” se trata de una “falacia” porque se trata de la “vida media actual de una generación”. En este sentido, ha añadido, “la esperanza de vida de los niños de ahora no es cierta. Seria así si no cambiara nada en los próximos cien años”.
Asimismo, el investigador del CSIC ha apuntado que el principal umbral para la demografía es que “la mayor parte de los nacidos viven los suficiente como para tener hijos”, a esto se suma que “los cuidados han mejorado”. De esta manera, “un hijo actual vive tres veces más que un hijo de 1900”. Por este motivo, se puede considerar, ha destacado, que ha habido una “explosión demográfica”, ya que se ha producido un “incremento brusco de la eficiencia reproductiva”.
Posteriormente ha intervenido Cayo quien ha afirmado que la institucionalización de los hospitales y centros de salud como gran paradigma “irá remitiendo como centro privilegiado de atención, a veces exclusivo y excluyente, para para dejar paso a una suerte de deslocalización múltiple en la que el domicilio o el espacio natural de convivencia de asistencia de la persona va a tener una importancia mucho mayor”.
Este cambio tiene consecuencias, ha explicado, porque los pacientes dejarían de ser un sujeto pasivo para adoptar una posición reforzada de “paciente empoderado que puede participar en el proceso de toma de decisiones”. En esta línea, el presidente del CERMI ha expresado que “todas las instituciones sanitarias y todas las estructuras sociosanitarias estarán al servicio de esa comunidad a la que pertenecen”. Esto es “bastante prometedor”, ha indicado.
En concreto, Cayo ha considerado que el modelo farmacéutico español “puede tomar posiciones de vanguardia, operando como un nodo de relaciones expansivas y como un motor de convergencia de todos los operadores del cuidado de la salud”. Así, ha apuntado, “la farmacia en el futuro será comunitaria, o no será”. En este sentido, Cayo ha animado al ámbito farmacéutico a “generar alianzas”, ya que, a su juicio, “los pacientes pueden colaborar a definir un cambio de paradigma de la asistencia sanitaria que sea un resorte respecto al cuidado”.
Por su parte, Ribera ha centrado su intervención en la dignidad del paciente: “Es difícil encontrar una buena definición de dignidad”, ha reconocido, pero es fundamental tener en cuenta, ha considerado, que “ser paciente no menoscaba la condición de digno”. Y es que la dignidad “no es un valor intercambiable por la capacidad funcional óptima, con la belleza, la salud o cualquier otro parámetro”, ha apuntado.
Además, el catedrático de Geriatría ha recordado que esta especialidad “nació para luchar contra el fatalismo y la resignación, para concentrar esfuerzos en la recuperación funcional, para encontrar y combatir situaciones clínicas, enfermedades y limitaciones, para integrar soluciones globales a los problemas médicos y sociales, así como para prevenirlos”.
A continuación ha intervenido Zamora quien ha destacado la apuesta por la “humanización” de las organizaciones de pacientes. Desde el punto de vista de la asistencia sanitaria el vicepresidente del Foro Español de Pacientes ha indicado que las principales barreras de la humanización sanitaria son “la falta de tiempo para atender a los pacientes por parte de los profesionales sanitarios, la falta de recursos humanos y económicos que permitan una atención sanitaria de calidad, la formación y la sensibilización de los profesionales sanitarios, así como la sensibilización de los ciudadanos”.
En último lugar, Brescané ha señalado que la CEAFA tiene entre sus objetivos principales “posicionar el Alzheimer en la agenda política para influir en las medidas nacionales que existen relacionadas con el abordaje integral de la enfermedad, convertirse en agentes de cambio social y poner en valor el conocimiento generado durante 25 años de experiencia”.
Así, ha recordado que la Organización Mundial de la Salud establece que “la principal causa de discapacidad y dependencia en las personas mayores es la demencia, en general, y el Alzeéimer, en particular”. Brescané ha destacado que, ante este tipo de enfermedades, las familias asumen una doble misión “por un lado se convierten en agente clave en el abordaje de la enfermedad y, por otro, están afectadas por sus consecuencias, en lo que se refiere al cuidado”.
Para finalizar, la experta ha subrayado que cuando se habla de calidad asistencial “hay un elemento fundamental, común a todas las esferas de cuidado: la dignidad”. En su opinión, “cualquier intervención o atención debe priorizar el respeto a la autonomía personal, siempre y cuando pueda hacerlo”, ya que “cuidar desde el respeto es la base de la humanización de la asistencia sanitaria”.
Acto de clausura
En último lugar, se ha celebrado el acto de clausura del encuentro en el que han participado el vicepresidente de la Asociación Española de Derecho Sanitario y director del encuentro, Julio Sánchez Fierro, la presidenta del Instituto de Formación Cofares, Yolanda Tellaeche, la presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cantabria, Rita De la Plaza y la coordinadora de Estudios y Programas de la UIMP, Rosa María Martín Aranda.
Fotografía: Juan Manuel Serrano | UIMP 2018