Santander.- El profesor de Filosofía Víctor Bermúdez ha sido el encargado de abrir la segunda jornada del seminario Conocimiento científico: en busca de sus fuentes, celebrado en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP). Su ponencia, enmarcada en la sesión titulada Diálogos filosóficos en la comunidad científica, ha girado en torno a la ciencia como un arte, donde ha mostrado su opinión sobre el tema y ha distinguido entre dos tipos de estética: el inmanentismo y el trascendentalismo.
En su intervención Hacia las fuentes de lo estético. ¿Es posible una ciencia del arte?, el ponente ha señalado que, bajo su punto de vista, sí es posible hablar de la estética como una ciencia. En este sentido, ha defendido que, “aunque en la ciencia contemporánea no se puede hablar de una ciencia del arte, en un sentido prekantiano, sí”.
En la parte introductoria, Bermúdez también ha mostrado algunas de las posturas que “niegan la posibilidad de que el arte sea una ciencia”, entre ellas el fenomenismo estético o naturalista, el convencionalismo o el emotivismo.
Por otro lado, el experto ha especificado que “la definición de arte debe ser prescriptiva, para que así implique un valor”. En relación a esto, ha hecho hincapié en que “ninguna ciencia puede obviar en su definición lo que debe ser y a qué se debe parecer”.
En cuanto a los dos enfoques de estética -el inmanentismo y el trascendentalismo-, ha señalado que la primera de ellas se basa en falacias, identificándose más con la segunda opción.
En concreto, ha detallado que el inmanentismo está formado por “teorías y definiciones que consideran que el arte es de naturaleza terrenal”. Asimismo, ha explicado que, según este enfoque, “las nociones estéticas pretenden ser descriptivas y a posteriori”. De esta corriente, también ha señalado que hay dos tipos: por un lado, positivista, divididos a su vez en naturalistas -neuroestética, psicoestética, sociobiología, darwinismo, antropología- y convencionalistas- de corte histórico cultural, que ven a la estética como un fenómeno ideológico- , y por otro, emotivo subjetiva.
En contraposición, ha destacado Bermúdez, el trascendentalismo es “el arte de naturaleza ideal”. El ponente ha matizado que esta posición estética pretende ser “a priori”, es decir, se deduce de ideas o teorías superiores. En relación a este enfoque ha diferenciado entre el trascendentalismo epistemológico -racionalismo, empirismo, Kant- y el ontológico –Platón, Hegel, Nietzsche o Heidegger-.
Bermúdez ha concluido su charla matizando que “el arte siendo tan utópico tiene que ser trascendentalista”. Asimismo, ha apuntado que “el arte no es un objeto que podamos entender empíricamente, sino que está más relacionado con la forma que con la materia”.
Fotografía: Esteban Cobo | UIMP 2018