Santander, 29 de julio de 2021- Cristina Narbona, vicepresidenta del Senado, ha asegurado que España, junto a países como Italia “ha jugado un papel fundamental para que se supere el tabú de que la UE no podía endeudarse de manera conjunta”, y ha destacado el papel “dinamizador” del país “para cambiar la política europea en materia económica”.
Narbona participa en el curso Quo Vadis Europa? IX. Hacia una Unión Europea geopolítica, parte de la programación de los Cursos de Verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), dirigido por Josep Borrell, vicepresidente de la Comisión Europea, donde se analizan los retos a los que se enfrenta la organización continental para diseñar una estrategia exterior común.
En este sentido, la vicepresidenta del Senado ha destacado las aportaciones de España al debate europeo, ya que según ha asegurado “ha puesto sobre la mesa la despoblación”, consiguiendo que “el reto demográfico sea un criterio para asignar fondos europeos”.
Además, ha apuntado que el país ha pujado fuerte por “cerrar las brechas de género y desigualdades” en el seno de la UE.
Una acción exterior europea
Narbona ha analizado también los retos a los que se enfrenta la organización continental a la hora de definir una acción conjunta en el exterior y exportar “aquellos valores que definimos como europeos”.
En este sentido, considera que hay que abrir un debate sobre si estos valores “son exportables o no” y tener en cuenta la “coherencia” a la hora de promocionarlos “cuando ya existen países europeos que cuestionan parte de ese acervo común en términos de libertad de expresión o derecho a la diversidad”.
Una acción exterior que deberá construirse “en un mundo multipolar”, donde la UE, de acuerdo a Narbona, debe construir una “autonomía estratégica” respecto a las dos grandes potencias, China y Estados Unidos.
Para construirla, la política ha destacado las lecciones de la pandemia para ser más independientes a nivel continental en materia sanitaria, ya que según ha apuntado, la UE ha tenido que exportar “mascarillas, test o vacunas”. “Hemos descubierto que en toda la UE no se produce ni un gramo de paracetamol”, ha apuntado
