Santander.– "La reforma no absorbe la verdadera problemática, derivada de la falta de medios" ha asegurado el consejero de Justicia de la Generalitat de Cataluña, Germà Gordó respecto a la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (Lecrim). Lo ha hecho en el encuentro Una Justicia de futuro que se está celebrando en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.
Según Gordó, con las modificaciones parciales "se ha perdido la oportunidad" de hacer una reforma integral, lo que supondría "tener una ley más homogénea, donde pudieran convivir mejor unas normas con otras", ya que, como ha recordado, en la Constitución aún hay disposiciones del siglo XIX. "Aunque si la reforma hubiese sido integral, las opciones del consenso serían menores", ha matizado.
El consejero de Justicia de la Generalitat de Cataluña, que ha dejado claro que "aplaude" más que "critica" la reforma Lecrim, ha puesto sobre la mesa algunos datos de instituciones del Consejo General del Poder Judicial que revelan que en España "hay 11,5 jueces por cada 100.000 habitantes" y en Cataluña, la cifra es de "10,5 jueces por cada 100.000 habitantes", mientras que la media europea es de 18 jueces.
En relación a los plazos de instrucción, Germà Gordó ha advertido de que "lo más preocupante" en esta reforma es que "se imponen unos plazos sin dotar a los jueces de los medios para hacerlos efectivos". Por eso, considera que las modificaciones se han quedado a medias, ya que, en este caso, se ralentizará la agilización que se tenía como uno de los principales objetivos, junto con los mecanismos para avanzar desde el punto de vista de la transparencia y los derechos procesales.
Fotografía: Pablo Hojas
