El escultor David Lechuga acerca a la UIMP su particular proceso de creación

Santander.- "Casa, caballo, jinete". Tres palabras sin relación aparente dan título al taller artístico que dirige el escultor español David Lechuga, conocido por sus tallas en madera de inspiración cubista. Sobre él, el artista ha explicado que hace referencia "a una escultura de Boccioni (creador futurista), pero en este caso voy más allá y recupero los movimientos de vanguardia históricos". Su intención es "ver la casa como espacio de confort, el caballo como la dinámica que generaremos para ampliar ese lugar y el jinete como el receptor al que se le dirige, el que personaliza el proceso".


Asimismo, el director de Casa, caballo, jinete. De lo sensorial a la creación ha hecho también referencia a la dinámica de su trabajo con los alumnos: "La persona es un ser globalizado: recibe información a través de los sentidos, pero no escucha por un lado y ve por otro de forma separada, sino que el sonido que observa puede llevarlo al mundo plástico por medio de la pintura, y el dibujo al movimiento" ha explicado. "A través de una sutil percepción crea espacios donde sensibiliza y poetiza las sensaciones que recibe". Además, el artista ha añadido que también son importantes "los estímulos y el propio acervo cultural. Con el calado del uno al otro, se crea una conciencia y unos medios de expresión". Así, "los alumnos al llegar a un estado de sensibilidad alto por medio de nuestras prácticas pasan de un campo a otro sin dificultad", ha explicado.
En el programa del curso se han incluido sesiones dedicadas a, por ejemplo, que los alumnos explicasen "qué significa la realidad" o a "la capacidad de cada uno para vivir el entorno, transformarlo y reinterpretarlo con formas sonoras, espacios y texturas, y plasmarlos en una obra plástica y volumétrica con materiales reciclados". También ha entrado en juego "el respeto y los límites con el otro, y la salida de la zona de confort".
En definitiva, Casa, caballo, jinete. De lo sensorial a la creación es trata de un taller interactivo que tiene en cuenta que "la creación y las ideas pueden surgir en cualquier momento". Y para conseguirlo, Lechuga ha propuesto someter a los alumnos a "un proceso de sensibilización" al que "se entregan fácilmente, sin emitir juicios y de manera lúdica. Es muy importante trabajar el proceso como parte de un juego": explorar y divertirse se convierten en la antesala de la creación.
"La alquimia del proceso"
Asimismo, la experta en medios y creatividad aplicada Inés González ha participado en el curso con la creación de un audiovisual que recoge el proceso de trabajo de las sesiones como apoyo a la reflexión y análisis de las conclusiones del taller. De esta forma, "los participantes recuerdan y registran la alquimia del proceso" según ha explicado.
Además, la colaboradora ha propuesto ejercicios de conciencia corporal de preparación a la creación y también ha incidido en la creación aplicada a intervenciones sociales como sobre "la sensibilización en violencia de género y la transversalidad de género".
El proceso de creación de este taller se puede ver en Coma3Taller.wixsite.com/crear

Fotografía:Juan Manuel Serrano /UIMP